Una cuestión de tamaño

miércoles, 29 de febrero de 2012

Mi amigo, poeta


Nos convoco

Para escribir un poema
sobre el sufrimiento
Un horror,
dijo,
horror horroroso,
el fin, la nada,
la muerte.

Dijo,
no es que te mueras sólo
en tu cama,
rodeado
de llanto y
del techo y las paredes.

No llega una bala,
perdida o encontrada
a cortarte el aliento,
a someter tu sueño

La muerte es
la nada que ganaste,
es el aire viciado,
es la ruina 
lo que existe,
de todo.

Nadie llorará a nadie,
nadie tendrá sus lágrimas.

Y eso es lo más horrible,
la muerte sin testigos,
sin últimas palabras
y sin sobrevivientes.
La muerte

¿Me entienden?

Quedamos en silencio
con las bocas abiertas,
tragamos el terror
con saliva helada,
luego nos fuimos todos
a cumplir

Juro que lo he intentado
pero cuando pienso
el lápiz se me cae
de la mano

Fede

sábado, 11 de febrero de 2012

¡Estrellas!


Que seguís mi destino
Quedaros cerca, junto a mí
Transformarte mi camino
Estar a mi vera,
Conviértete en mi cobijo
Dame fuerzas para seguir
Estemos juntos...
Seamos uno mismo

Ya no hay vuelta atrás
vida consumida
Cenizas de un tiempo vencido
Viento que me llevó a ser ave
Brisa de un rumbo perdido

Gaviota de asfalto sombrío
Llévame hacia tu cielo de estío
Tú, se mi sombra,
Tú, te vienes conmigo

Lee mi corazón embotellado,
Que el mar el misterio arroja sin pensar
Turbias aguas se irán contigo, hacia lo inédito
Vete y no vuelvas, no te quiero cerca de mí
No vuelvas, te necesito, yo ya sin ti nada soy

Ese será nuestro momento, reencuentro
Más intenso que un suspiro, más duro mármol
El único que recordaremos en lo profundo
Porque hoy yo de ti... me despido

Fede