Una cuestión de tamaño

miércoles, 25 de enero de 2012

Señales




La luz al fondo de la calle que parpadea (dos veces) y al final se apaga.

Un bocinazo en el silencio de la madrugada.

Amarillo y rojo el sol se levanta sobre el mar, en el momento preciso del nudo en el estómago.

Sopla descarada la brisa, olor a criollitos imposibles, en esta ciudad no tienen idea.

Hoy el cielo reclama su azul a los gritos, como nunca antes.

El viejo pasa tambaleándose y es la  imagen de los domingos por la tarde que creías olvidada.

Un benteveo se posa en el cable del teléfono y chilla un reclamo que suena como su nombre.

Inexplicablemente, los paraísos han florecido. Recién.

Las palabras que rondaban
desencajadas todas las noches por tu cabeza, al fin toman la forma perfecta.

Levanto la mano y la agito en el aire; estoy acá.

SL

lunes, 23 de enero de 2012

Sendero


Si el brillo que te iluminó
También existe dentro de mis recuerdos
Probaré todo
Para buscar mi razón de existir
Dentro el caos digo
¿Dónde puedo conseguir el verdadero amor y destino en este momento?
Todos los humanos olvidarán
Las cicatrices de sus heridas
Cada vez que ven pasar el tiempo
Sus emociones se desvanecerán
Para ya no lo quiero seguirlo negando
Tiempo fuera, porque una imagen se desvanecerá
Y esa imagen eres tú
Así que ahora tu y yo
No puedo creer que sin ti a mi lado…
Creeré… incluso la soledad y el destino
Son los ardientes fragmentos del recuerdo
Son el brillo que se refleja en el futuro

Si el brillo que te iluminó
También existe dentro de mis recuerdos
Probaré todo
Para encontrar el futuro donde coexistiremos… Creeré
Este no es solo el final…


Fede

domingo, 8 de enero de 2012

Adiós



Por que ni tanto amor...
A pesar de todo lo hemos pasado
Y solo lágrimas me robas hoy
Por que las sonrisas se han terminado

No vez que más de una vez hemos dicho adiós
Y ahora que todo ha llegado a su final
¡Míranos! somos ya un par de extraños
Si volteo y estas tu, solo migajas de que algo ha pasado

Lo que me acompaña en esta vida, ¡Soledad!
En un hermoso atardecer con tanto fuego y lleno de vida
Que solo se evapora, lo que queda de este cuerpo marchito
Y que ahora vaga por las calles por ser tan helado

Todo el tiempo que me queden suspiros, pensare en ti
Hasta que pueda volver ha llenar de valor mi corazón
Para el próximo encuentro de amor
Y todo por tu tan inesperado, dichoso adiós.


Fede